La Guerra de Cuarta Generación
Para entender lo que hay detrás (el objetivo y los actores
encubiertos) de lo que hoy se presenta mediáticamente como "rebeliones
espontáneas" contra diferentes gobiernos, hay que bucear en los manuales
de la Guerra de Cuarta Generación (Fourth Generation Warfare - 4GW), que es el término usado por los analistas y estrategas
militares para describir la última fase de la guerra imperialista de conquista,
en la era de la tecnología informática y de las comunicaciones globalizadas.
El desarrollo tecnológico, tele comunicacional e
informático, la globalización del mensaje y las capacidades para influir en la
opinión pública mundial, convirtieron a la Guerra Psicológica mediática en el
arma estratégica dominante de la 4GW, a la que se agregó una variante
"contraterrorista" tras los ataques explosivos del 11-S en EEUU.
En su desarrollo mediático-social, los jefes y oficiales de
Estado Mayor de la Guerra Psicológica (4GW) ya no son militares, sino expertos
comunicacionales en insurgencia y contrainsurgencia, que sustituyen a las
operaciones militares por las operaciones psicológicas (OPS).
Ya no desarrollan sus planificaciones en unidades o cuarteles militares, sino en laboratorios
encubiertos de comunicación estratégica donde se diseñan los planes de Guerra
Psicológica a ser ejecutados a través de las grandes estructuras mediáticas de
comunicación masiva y las redes de la
Internet infiltradas por la inteligencia de la OPS.
De esta manera, y a partir del 11-S norteamericano, la "Guerra Psicológica" (con su
variante la "Guerra
Contraterrorista") conforma la
columna vertebral estratégica de la Guerra de Cuarta Generación, con los Medios
de Comunicación y las redes informáticas convertidos en los nuevos ejércitos de
conquista.
La Guerra Psicológica conforma el estadio superior de las
estrategias de control y dominación ensayadas hasta ahora por los sistemas
imperialistas (dominación del hombre por el hombre) que se fueron sucediendo
hasta llegar al sistema capitalista.
En la Guerra Psicológica (columna vertebral de la Guerra de
Cuarta Generación, sin uso de armas) las operaciones con unidades militares son
sustituidas por operaciones con unidades mediáticas.
La Guerra Psicológica, a su vez, nace en un particular
estadio del capitalismo caracterizado por una revolución en el campo de las
ciencias sociales y de la comunicación estratégica.
Dicha revolución se complementa con una revolución en el
campo de la tecnología de las comunicaciones y de la informática, creando las
bases para una comunicación estratégica globalizada basada en principios
científicos.
A su vez las técnicas científicas de comunicación,
potenciadas a escala masiva y planetaria por los grandes conglomerados
mediáticos del capitalismo, crearon las bases para su utilización en
estrategias de manipulación y de control social desarrolladas a partir de los
objetivos de la dominación imperial-capitalista.
Esta situación creó las bases operativas y estratégicas para
el control y dominio de las sociedades y países, sin recurrir a la utilización
de la guerra militar.
De esta manera (y con pocas excepciones como las zonas de
conflicto y de ocupación militar), la actual guerra imperialista por
apoderamiento de mercados y países ya no se desarrolla en el plano de la
conquista militar-territorial, sino en el plano de la conquista
psicológica-social instrumentada mediáticamente.
F) El nuevo teatro de operaciones (el blanco es el cerebro)
Como en la guerra militar, un plan de guerra psicológica
está destinado a: aniquilar, controlar o asimilar al enemigo.
La guerra militar y sus técnicas se revalorizan dentro de
métodos científicos de control social, y se convierten en una eficiente
estrategia de dominio sin el uso de las armas.
A diferencia de la Guerra Militar convencional, la Guerra de
Cuarta Generación no se desarrolla en teatros de operaciones visibles.
No hay frentes de batalla con elementos materiales: la
guerra se desarrolla en escenarios combinados, sin orden aparente y sin líneas
visibles de combate, los nuevos soldados no usan uniforme y se mimetizan con los civiles.
Ya no existen los elementos de la acción militar clásica:
grandes unidades de combate (tanques, aviones, soldados, frentes, líneas de
comunicación, retaguardia, etc).
Las bases de planificación militar son sustituidas por
pequeños centros de comando y planificación
clandestinos, desde donde se diseñan las modernas operaciones tácticas y
estratégicas a desarrollarse en los medios de comunicación y el campo de
Internet y la telefonía celular, factores claves de la movilización de conducta masiva.
Las unidades de Guerra Psicológica son complementadas por
Grupos Operativos, infiltrados en el campo de la política y de la población
civil con la misión de detonar hechos de violencia y conflictos sociales.
Las tácticas y estrategias militares, son sustituidas por
tácticas y estrategias de control social, mediante la manipulación informativa
y la acción psicológica orientada a direccionar conducta social masiva con la
Internet y los teléfonos celulares jugando como ejes inductores y
concentradores.
Los blancos ya no son físicos (como en el orden militar
tradicional) sino psicológicos y sociales. El objetivo ya no apunta a la
destrucción de elementos materiales (bases militares, soldados,
infraestructuras civiles, etc), sino al control del cerebro humano.
Las grandes unidades militares (barcos, aviones, tanques,
submarinos, etc) son sustituidas por un gran aparato mediático compuesto por
las grandes redacciones y estudios de radio y televisión.
El bombardeo militar es sustituido por el bombardeo
mediático: Las consignas y las imágenes sustituyen a las bombas, misiles y
proyectiles del campo militar.
En la Guerra sin Fusiles, la Guerra de Cuarta Generación
(también llamada Guerra Asimétrica), el campo de batalla ya no está en el
exterior, sino dentro de las mentes.
Las operaciones ya no se trazan a partir de la colonización
militar para controlar un territorio, sino a partir de la colonización mental para controlar una
sociedad.
El objetivo estratégico ya no es el apoderamiento y control
de áreas físicas (poblaciones, territorios, etc.) sino el apoderamiento y
control de la conducta social masiva.
Las unidades tácticas de combate (operadores de la guerra
psicológica) ya no disparan balas sino
consignas direccionadas a conseguir un objetivo de control y manipulación de
conducta social masiva.
G) El nuevo Objetivo estratégico
(La función de la Guerra Psicológica)
Los nuevos proyectos geopolíticos de conquista imperialista
en la era trasnacional de las comunicaciones requieren de sofisticadas
estrategias de Guerra Psicológica para su imposición sin el uso de las armas.
Los fines prescriptos por la estrategia de dominación con la
Guerra Psicológica son los mismos que se utilizan con la guerra militar:
dividir, atomizar, controlar al individuo-masa de las sociedades dependientes
(el AP). Es la lógica de Maquiavelo
aplicada por medios científicos y tecnológicos.
La Guerra Psicológica librada en el plano de la comunicación
estratégica y de las grandes estructuras mediáticas (los nuevos ejércitos de
conquista) no se hacen por la conquista misma, sino en la búsqueda de un
objetivo estratégico orientado en los intereses económicos de las potencias y
las trasnacionales capitalistas.
La función de la Guerra Psicológica imperial-capitalista
actual se orienta en tres objetivos
claves:
1) Conquista de mercados emergentes (sociedades y países
periféricos), mediante la imposición de la "cultura consumista"
nivelada y globalizada por los medios masivos de comunicación, actuando sobre
la psicología del hombre AP convertido en individuo-masa.
2) Control y dominación social (en los países dependientes),
orientado a la represión y/o neutralización de conflictos sociales que amenacen
el desarrollo de los planes empresariales y la acumulación y expansión de la
ganancia capitalista trasnacional.
3) Disputas ínter-potencias por los mercados, destinada a
sustituir a la guerra militar por áreas de influencia (también por conquista de
mercados) enterrada con la guerra Fría.
E) El frente mediático
Una plan de Guerra Psicológica, no se hace con soldados y armas militares sino
con medios de comunicación e individuos masificados (los AP) nivelados
universalmente por los mismos estereotipos culturales y sociales.
El mensaje mediático a escala global nivela y masifica al
individuo universal en una sola frecuencia comunicacional.
La realidad es sustituida por la percepción de la realidad a
través del mensaje mediático-periodístico convertido en consignas, eslóganes y
títulos, antes que en pensamiento
reflexivo totalizado.
A través de la
manipulación psicológica y el control ideológico, la sociedad civil, el
individuo-masa suplanta a los soldados militares en el campo de batalla.
En la Guerra Psicológica, la potencia de fuego del soldado
militar es sustituida por la potencia social del individuo-masa con su conducta
manipulada hacia objetivos de control y dominación social, fijados por el
capitalismo trasnacional para conquistar mercados y controlar a las sociedades
consumistas.
Manipular, controlar, y convertir a este individuo-masa en
potencia social direccionada con fines de control y dominio político-social es
el objetivo estratégico clave de la Guerra Psicológica de última generación.
La guerra por el dominio y control de las sociedades y de
las mentes, sólo se produjo a partir de la interacción funcional de la
tecnología (medios de comunicación) y de la informática (electrónica y
computación) orientada a un objetivo de control y dominio mediante una
estrategia comunicacional.
El factor mediático (medios de comunicación, electrónica y
computación, y estrategias comunicacionales) posibilitó que la guerra por el
control y el dominio imperial
capitalista tocara su máximo estadio de desarrollo estratégico: la Guerra de
Cuarta Generación.
En resumen, en la Guerra de Cuarta Generación se
contienen las técnicas y estrategias
operativas direccionadoras de conducta colectiva que subyacen detrás de lo que
ingenuamente se conoce como "protestas populares espontáneas" que las
grandes cadenas mediáticas imperiales instalan como una verdad aceptada a
escala global.
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